lunes, 30 de abril de 2012

Caricias del jazz I



“Siento que la música está en su mejor estado y que me lleva a una alegría que no se puede explicar”

Laura Jaet es una excantante de una banda pop, sin embargo, el amor por el jazz le hace vivir extremas sensaciones. Sus comienzos en la música, los lugares para escuchar jazz y las nuevas propuestas argentinas del género.

Por Jonatan Saiz


El pasado y el presente. Un futuro incierto. El jazz que invade sus días, al mismo tiempo que de su boca suenan melodías del género musical anteriormente mencionado. Laura Jaet, una mujer bella, de pelo largo rubio, respira jazz hace años y demuestra que la música le enciende su cuerpo para llevarla a dimensiones jamás vividas.
Laura tiene 45 años y es empleada administrativa. En la década de 1980 cantaba para DIU, una banda pop que luego se separó por diversos motivos. Sus inicios en el arte, sin embargo, datan desde hace muchos años: “Canto jazz desde los 16 años y escucho jazz desde la panza de mi mamá”. En su casa toda la vida se respiró música y ella lo recuerda como algo muy significativo: “Siempre fueron musicólogos en mi familia, todos escuchaban de todo: clásica, folklore, tango, pero lo que más recuerdo es escuchar a Errol Gardner, Count Basie o Muddy Watters, una mezcla de cosas”.
Laura descubrió la música desde que estaba en la panza de su mamá, sin embargo, Ella Fitzgerald fue la mujer que le hizo un quiebre en la cabeza y en el corazón y se decidió por ser cantante de jazz.  En la actualidad, Laura Jaet recomienda a Eleonora Eubel, Roxana Amed y Delfina Oliver como las grandes artistas nacionales del momento. Por el lado masculino, Manuel Fraga, Oscar Giunta y Jorge Navarro son sus músicos preferidos.
El circuito de jazz de Buenos Aires está latente, con diversas novedades de músicos para escuchar y tocar jazz: “Realmente hay mucha movida, desde Notorious a Clásica y Moderna, como lo habitual que es Thelonious, que es mi lugar favorito. También están Éter Bar y Un Lugar en Ortúzar”. A pesar de todo, desea que haya más lugares para poder disfrutar jazz.
La Jam es una propuesta que a Laura le fascina y recomienda lugares donde ocurren hermosas zapadas: “En Jazz & Pop, en Éter y en Un Lugar en Ortúzar se dan lindas noches de jam. Y también podes encontrar nuevos y buenos artistas en el Centro Cultural Despertar en Colegiales”. Dentro de las nuevas generaciones de músicos, le gusta mucho Juls Rodríguez Sohlner, a quien declara que "con tan solo 18 años, y de hacer shows en Liberarte y tocar con figuras del jazz porteño, es una exponente de esta juventud".


Para Laura, el sentido de escuchar jazz puede venir en cualquier momento, sin ningún detalle encima, o bien, puede ser en conjunto con otras acciones: “Depende de cada persona la onda para escucha buen jazz; yo tengo como costumbre poner el mp3 cuando tengo ganas de hacerlo. Pero también podría decirse que se puede escuchar bebiendo una buena copa de vino”.
Laura desparrama melodías en sus palabras. Conecta cada nota en cada declaración que dispara. Cuando BuenosAires Jazz le consultó acerca del sentimiento que tiene cuando el jazz sacude sus oídos, la excantante de DIU cerró con una profunda sensación: “Siento que la música está en su mejor estado y que me lleva a una alegría que no se puede explicar, tan solo se puede reproducir cantando”.